Hoy toca el Parque Nacional de Þingvellir y por la tarde Reykjavik.
Mucho sol. Creo que todo el que no hemos tenido estos días, nos lo han soltado hoy…
El PN de Þingvellir tiene dos cosas destacables. Una es que uno de las instituciones parlamentarias del mundo fue creada aquí en el año 930DC. La otra es que es un ligar fantástico para ver las placas tectónicas que dividen Europa de América. ¡Además en Otoño está precioso de colores!
Reykjavik me ha robado el corazón. Una ciudad sencilla pero elegante donde se juntan espectaculares graffitis, con arquitecturas como la de la Catedral Luterana Hallgrímskirkja que simula colúmnas basálticas.